Conversamos con el presidente del Consejo de Obras y Servicios Sociales Provinciales (COSSPRA) e interventor del IPSS Tucumán, Fernando Avellaneda, sobre lo realizado por la organización durante el año que termina y resaltó el rol convocante del Consejo que, como organización con una mirada y un sentido federal, logró ser parte de la escena político-sanitaria. Además, subraya el compromiso de las OSP en todos los espacios.
¿Con qué grado de participación trabajaron las OSP este 2022 en COSSPRA?
Este 2022 fue un año particular. Pudimos movilizarnos post-pandemia y, más allá de que la virtualidad nos permitió mantener las conexiones y generar trabajos conjuntos en algunas pequeñas áreas, la vuelta a la presencialidad en los encuentros fue clave. De las reuniones de Junta participaron en promedio más de 18 OSP, que lo hicieron en forma permanente. Las que no pudieron asistir, se sumaron en formato virtual, demostrando un enorme compromiso, y esto se vio plasmado no solo en la constante participación a las reuniones que obligatoriamente nos convocan, sino también en los espacios intermedios.
Uno de ellos fue la Escuela de Gobierno, donde hubo dos hitos importantes. Uno fue el Curso de Amparo en la Salud, generado desde el Gobierno Nacional, con una convocatoria importante, pero de la cual no participaron en su mayoría las OSP. Luego, utilizando el mismo grupo de docentes generamos un curso con la OISS donde más del 80 por ciento de los participantes fueron de COSSPRA, de las áreas legales y prestacionales de las distintas OSP y de PAMI.
¿Qué destaca como fortaleza este año para COSSPRA?
En relación a las OSP, la participación en áreas de aprendizaje y de mejora contínua, el compromiso con el conocimiento, su involucramiento no solo en las Juntas, sino en los espacios de formación.
Paralelamente y no necesariamente relacionado con COSSPRA, aunque sí de alguna manera nos involucra, los empleados de las OSP han repetido sus olimpíadas, que se hicieron en Tucumán este año y que convocaron a más de mil trabajadores de las obras sociales provinciales de todo el país. Tuve la oportunidad, como provincia anfitriona, de ver no solo la participación de los representantes de casi todas las jurisdicciones -21 provincias participaron de las diferentes disciplinas deportivas- sino también de un destacado grado de compañerismo y solidaridad, que si bien vi en años anteriores, este año, luego de dos años de pandemia, fue más significativo.
Nos enorgullecen situaciones como éstas, paralelas a COSSPRA pero que hacen a la vida de las OSP, a sus organizaciones y a las características que tiene el grupo social al que pertenecen. Ese mismo espíritu es el de COSSPRA, que forma parte de ese amalgamiento entre las autoridades en cuanto al trabajo conjunto.
¿Cuáles son los objetivos más importantes que alcanzaron?
Si hay algo que puede sobresalir este año es el rol convocante de COSSPRA y no es casualidad que una organización con una mirada y un sentido federal real haya logrado ser parte de la escena político-sanitaria. Sin lugar a dudas fue lo más importante. Pero es la consecuencia de un trabajo que lleva más de seis años, donde el Consejo ha ido participando del sistema de salud nacional en las distintas instancias donde fue convocado.
Hoy participamos en la CONETEC, en la Subsecretaría de Calidad del Ministerio de Salud de la Nación, fuimos convocados por la Secretaría de Trabajo como órgano de consulta sobre el incremento a los trabajadores de la Salud. Estas áreas que nos convocan dan cuenta que COSSPRA tiene que ser un partícipe necesario. Por otro lado, apenas asumido el Dr. Fabián Puratich como Subsecretario de Integración de Subsistemas de Salud y de Políticas de Primer Nivel de Atención fuimos convocados, esto es un signo claro de que somos referentes para cualquier mirada de gestión y política sanitaria del país.
¿Con qué actores del sector interactuaron en función de objetivos comunes?
Trabajamos y dialogamos con prestadores de salud de todo el país, la Confederación de Clínicas y Sanatorios, ADECRA, FAPS, Salud Federal, en definitiva, prestadores que están representados en distintas entidades. También establecimos diálogo con las áreas de regulación tanto del Ministerio de Salud como de la Superintendencia de Servicios de Salud, que se han dado en forma natural durante el año.
Sin embargo necesitamos, y ya no depende de COSSPRA, un paso conjunto de todas las áreas para terminar de formalizar esas políticas pensadas y diseñadas, que precisan de una confirmación. Somos parte, pero no los responsables principales de llevarlas adelante.
En octubre se llevó a cabo el 2do Congreso Nacional, ¿cuáles son sus conclusiones?
La organización del II Congreso Nacional de COSSPRA fue, sin duda, la torta con su frutilla. El primer Congreso se hizo en 2018 en Santa Fe, pero el segundo no se pudo realizar por la pandemia y este año, si bien tempranamente decidimos hacer la convocatoria, recién en el mes de abril pudimos definir que la anfitriona fuera la provincia de San Luis. A nivel político, el gobierno provincial mostró un gran compromiso, con un apoyo explícito en este encuentro nacional. Y es muy simbólico, porque las obras sociales provinciales tienen la responsabilidad de la gestión sanitaria y la cobertura de salud de sus beneficiarios, y esa cobertura va de la mano no solo de la mejor administración y mayor eficiencia sino también del apoyo político que ese equipo de gestión recibe.
San Luis es un ejemplo en el apoyo que le brinda a la obra social provincial y lo fue por el que le brindó al Congreso Nacional de COSSPRA. Convocó a más de 300 participantes, tuvo visualizaciones por streaming que superaron también las 300 en vivo y la participación fue multisectorial. La libertad de poder expresar distintos puntos de vista fue manifestada por cada uno de los que fueron parte de las mesas de debate. Todos y cada uno buscaron, desde su mirada, aportar ideas para un sistema integrado de salud.
Finalmente, ¿qué balance puede hacer del año que termina?
El balance es muy positivo, aunque siempre tiene sabor a poco, porque quedan pendientes y objetivos por lograr. Sin embargo, sabemos que lo que resta ya no depende sólo de nosotros. Sí, por supuesto, debemos estar presentes en todo lo que signifique avanzar, pero va a depender de todos los actores en conjunto la toma de decisiones definitivas.
También rescato que se confirmó la idea de un trabajo en equipo, que genera consenso, que garantiza un trabajo en sociedad no solo con las obras sociales provinciales, sino también hacia afuera. La lista de integración que hoy es el nuevo Consejo Directivo, es el reflejo de que el trabajo siempre ha sido conjunto.
En lo personal, es un orgullo que mis pares hayan decidido que pueda continuar, eligiéndome por segunda vez como presidente. Ahora el objetivo es consolidar lo hecho hasta acá, para los que vengan; sabemos que el recambio es necesario y también responde a una lógica en la política de Tucumán, donde cumpliré mi ciclo.
Mi mirada está siempre puesta en el horizonte, no se termina nunca el trabajo, siempre hay mucho por hacer. Y en el mientras tanto, debemos hacer las cosas de forma ordenada para darle continuidad. Ya estamos trabajando en un plan estratégico 2023-2024.